Primeros cinco años de maternidad

La primera sonrisa. La primera avena, el primer jugo de granadilla. Los primeros intentos por avanzar. El primer baño caliente. Los primeros pasos. La primera vez “Mamá”. Gracias.Hoy tienes cinco años. Todavía no lo entiendes muy bien pero definitivamente intentaré hacerte entender que este día especial, no es solo especial para ti, es especialmente para mí.

Hubo y hay días, en los que estoy desesperada. Tu activo cuerpo sigue siempre su propia voluntad. Si algo no pasa por tu dulce cabeza, lo cuestionas. Has llegado a regañarme, a gritarme y hasta pegarme que a veces siento que no doy más. La siesta del día siempre ha sido una lucha, por eso al año y medio no dormías más. Y con frecuencia me has llevado a mis límites. Tanto que noche tras noche me autoevaluo, lloro y al siguiente día corrijo mi error. Cada día me haces ser una mejor persona. Porque la tarea no es fácil, ni justa. Hay momentos en que me siento débil. ¿Cómo te ayudare a convertirte en una mujer, responsable, libre y fuerte? En lo profundo de mi corazón lo sé, tu papá, Aurora, tú y yo, somos un gran equipo y podemos hacerlo. Porque eres especial, especialmente para mi.

Cuando te miro, llega a mi corazón tanto amor como nunca antes había sentido en mi vida. Este amor tenía que crecer, claro, con tantos años, pero ahora es tan intenso que casi no sé qué hacer con él. Me encanta abrazarte y besarte. Me encanta jugar a las escondidas, pintar abstracto, correr mientras tu pedaleas, me encanta cantar, bailar y redescubrir el mundo a través de tus ojos. Todo sobre ti es especial, especialmente para mi.

El comienzo de este mundo no fue fácil para ti. Llegaste con tan solo 7 meses, pero siempre tan guerrera, saliste adelante sin oxigeno, medio tiempo de mamá y medio tiempo de papá. De verdad una guerrera solo que atrapada en tu pequeño cuerpo. Ahora todo funciona mejor. Y ahora todo es especial, especialmente para mi.

A menudo te sientes frustrada, más cuando algo no funciona de inmediato. Lloras con facilidad. También ríes a carcajadas. Te lo dejo. Te lo dejo todo. ¿Y quién podría comprenderte mejor que tu madre? Se que muchas veces chocamos, y lo seguiremos haciendo más a menudo. Me haces un espejo. Tal vez eso es lo que me ha regalado la vida. Tu. Mi espejo.

Pero no espero que seas como yo. Deberas convertirte en ti. La manera en que decidas hacerlo la decides tu y solo así será la mejor. Se libre, salvaje y maravillosa. No te restrinjas y sigue tu camino. Yo te ayudaré. No te forzaré a seguir ningún patrón. No voy a imponer  sobre ti ningún pensamiento. Te ayudaré a encontrar tu propia opinión y a seguir tu propio camino. Trataré de ser un buen modelo a seguir para ti. Trabajaré en mí misma, para ti. Porque debes tener una infancia feliz, plena, maravillosa y única. Eres especial. Especialmente para mi.

Te deseo que en tu vida aprendas a pensar libremente. Que no te dejes manipular, pero que si te dejes convencer. Que sigas tu camino pero aún cuidando el camino de los demás. Deseo que hagas muchos amigos y conocidos en tu vida que te lleven cuando no puedas caminar. Deseo que aprendas cuán valioso es el tiempo y que disfrutes el momento. Deseo que siempre disfrutes de la mejor salud y reconozcas en momentos de enfermedad lo agradecidos que podemos estar por un cuerpo sano. Deseo que seas consiente de que los valores internos son más importantes que el aspecto exterior. Te deseo que puedas viajar por el mundo para obtener una imagen de otras realidades de la vida. Deseo que bailes toda la vida sin tener que preocuparte por lo que otros dicen de ti. Deseo que puedas amar, que regales tu corazón sin temor a ser roto. Deseo que tengas acceso a tu alma y te enamores de ti misma. Deseo que siempre escuches tus pensamientos en el sonido de las olas, sobre una autopista o con la calma del viento. Deseo que te levantes nuevamente después de caer. Deseo que seas feliz. Eso es especial. Especialmente para mi.

Y ahora mi pequeño milagro tienes cinco años. Mi bebé se convirtió en un niña. Estoy sentada aquí y de alguna manera todavía no puedo creerlo. Mi bebé, mi niña, ahora se está convirtiendo en una niña mayor.

También te puede interesar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.